En el teso que domina el caserío y que le da nombre, se alzan los restos de la fortaleza medieval que en el siglo XIII pertenecía a la Orden Teutónica. Formaba parte de la línea defensiva de los Montes Torozos, territorio disputado durante siglos por castellanos y leoneses.
En cuanto a sus celebraciones, el día 6 de mayo festejan al apóstol San Juan ante la Puerta Latina, con procesión donde las mujeres solteras recogen rosquillas por el pueblo. Al día siguiente lo hacen las casadas.
Donde aparte de los tradicionales disfraces, se va haciendo un recorrido por el pueblo donde se va pidiendo por las casas un bollo y un licor de café, típicos y elaborados artesanalmente en la villa.